El siguiente organizador gráfico, es un mapa
conceptual, tiene como temática principal a la ciencia pero en concordancia con la educación básica, incluye 4 apartados, el
primero relaciona a la ciencia con el conocimiento, el segundo afirma que se
debe llevar a la práctica la teoría, el tercero indica que la ciencia influye
en los problemas sociales y el último el impacto de la ciencia en la vida
diaria.
Sirve para conocer la utilidad de la ciencia y los énfasis que se les debe dar en la escuela,
también para saber cómo involucrarla a las clases que brinde en las prácticas y poder resaltar sus cualidades a los chicos de secundaria especialmente.
Reflexión
Aprendí que los
medios de comunicación han creado el estereotipo de hacernos ver a la mayoría
de las personas, que la ciencia es algo complejo, pero realmente es algo con lo
que vivimos cada día, sin embargo, hace falta aplicarla correctamente.
Mi áreas de
oportunidad es, incluir en las clases, esos hábitos que nos marca la ciencia,
para tener un mejor desenvolvimiento con mis alumnos, creando en ellos
aprendizajes para la vida, como por ejemplo: alimentarse sanamente.
Me gustaría saber, ¿de qué
manera brindar clases que en efecto, incluyan esos 4 aspectos de la ciencia?,
ya sé cuáles son, pero ahora me interesa saber el cómo lograrlo, es decir, la parte procedimental.
Recomendaciones
Investigué sobre la ciencia en la escuela, ya que como futuros docentes, es nuestro campo de trabajo, entonces es primordial leer lo que a continuación podemos ver, para conocer la condición actual de los planteles en cuanto a la temática.
La ciencia en la escuela
La ciencia en la escuela desde esta perspectiva, ¿Cuál es la condición actual de nuestras instituciones para hacer presente la ciencia en la escuela? Si bien se han realizado esfuerzos para divulgar la ciencia y desarrollar programas de apoyo para acercar a los estudiantes al conocimiento científico, aún se carece de estrategias y criterios que mediante propuestas alternas den lugar a una nueva mirada del quehacer científico. Es necesario anular la banalidad, la pobreza de expectativas y los estilos burocráticos que traicionan y sacrifican la condición humana, los cuales son parte de la vida escolar cotidiana (Hidalgo: 2000).
No se considera que los protagonistas del quehacer científico y quienes lo estudian (científicos, maestros y alumnos) poseen historias de vida, estructuras neuronales, contenido informativo innato y adquirido, características fisiológicas, ocurrencias, sentimientos y deseos sobre los cuales construyen significados. Pocas veces se reflexiona sobre la complejidad de estos elementos y mucho menos acerca de cómo intervienen en la construcción del conocimiento.
Hoy se reconoce que el prejuicio, el inconsciente, la ideología y las creencias están presentes en la construcción del conocimiento y, pese al avance de los estudios, aún se ignora qué pasa realmente en la mente de un científico a la hora de construir sus representaciones.
El sujeto construye su mundo y éste se configura a partir de
los mundos que construyen los demás, los cuales representa a través de
símbolos. La construcción de mundos es
característica de la especie humana, ya que constantemente construimos
representaciones del mundo y nuestra aproximación a ellas es el conocimiento.
Éste sugiere un comportamiento a nuestra mente y hace evolucionar la razón, la
cual es, según Mazuchelli, mayormente inconsciente, ampliamente imaginativa y
está comprometida emocionalmente.
La ciencia en la escuela desde esta perspectiva, ¿Cuál es la condición actual de nuestras instituciones para hacer presente la ciencia en la escuela? Si bien se han realizado esfuerzos para divulgar la ciencia y desarrollar programas de apoyo para acercar a los estudiantes al conocimiento científico, aún se carece de estrategias y criterios que mediante propuestas alternas den lugar a una nueva mirada del quehacer científico. Es necesario anular la banalidad, la pobreza de expectativas y los estilos burocráticos que traicionan y sacrifican la condición humana, los cuales son parte de la vida escolar cotidiana (Hidalgo: 2000).
No se considera que los protagonistas del quehacer científico y quienes lo estudian (científicos, maestros y alumnos) poseen historias de vida, estructuras neuronales, contenido informativo innato y adquirido, características fisiológicas, ocurrencias, sentimientos y deseos sobre los cuales construyen significados. Pocas veces se reflexiona sobre la complejidad de estos elementos y mucho menos acerca de cómo intervienen en la construcción del conocimiento.
Hoy se reconoce que el prejuicio, el inconsciente, la ideología y las creencias están presentes en la construcción del conocimiento y, pese al avance de los estudios, aún se ignora qué pasa realmente en la mente de un científico a la hora de construir sus representaciones.
El sujeto construye su mundo y éste se configura a partir de
los mundos que construyen los demás, los cuales representa a través de
símbolos. La construcción de mundos es
característica de la especie humana, ya que constantemente construimos
representaciones del mundo y nuestra aproximación a ellas es el conocimiento.
Éste sugiere un comportamiento a nuestra mente y hace evolucionar la razón, la
cual es, según Mazuchelli, mayormente inconsciente, ampliamente imaginativa y
está comprometida emocionalmente. 
Bibliografía
http://www.dgespe.sep.gob.mx/public/rc/programas/material/la_ciencia_en_la_escuela.pdf
J, Gutiérrez. (1982). Cuatreo ideas sobre la enseñanza de la ciencia en la educación básica. Biología. Vol. 12. México. (pp.37-40).
J, Gutiérrez. (1982). Cuatreo ideas sobre la enseñanza de la ciencia en la educación básica. Biología. Vol. 12. México. (pp.37-40).
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